Hermanos....Antetodo deciros que os amo . Es dicho amor, el creador y la fuente de inspiración absoluta, que guía y da sentido a las palabras que con una compasión inmensa por el prójimo,trato de transmitir desde la esencia más profunda de mi mente poeta, hasta la última partícula atómica de todo mi ser. sin él, reposaría como una bella amatista en la eternidad, al amparo de los elementos, acomodado a lomos de la madre tierra, bajo el influjo del todo-poderoso UNIVERSO.
- Hoy aquí, en una plácida y majestuosa noche, bajo una manta de estrellas de incomparable belleza, relajado, cierro los ojos, inmerso en un estado meditativo profundo de quietud absoluta. El silencio se convierte en mi fiel compañero, que calma por completo ese huracán de pensamientos que bombardean constántemente la paz de mi espíritu . Es ahí, a merced de ese vacío, donde incomprensíblemente se descontrola toda dualidad y raciocínio de mi mente analítica y entro en una desconocida dimensión que desconcierta por momentos la experiéncia de mi existéncia.
- Sorprendido e inmerso bajo esta magia universal, observo el minutero de un viejo reloj que ha transcendido en el esapcio-tiempo.
Atónito, mis ojos no dan crédito cuando sin más, retrocedo en el tiempo miles de años y me transformo en una alma cósmica, que navega plácidamente en un barco invisible sin rumbo, en los confines del espacio absoluto.
Maravillado, observo a mi derecha como, unos imponentes planetas conversan viejas histórias milenarias con sus vecinos satélites.
A unos pocos años luz mas adelante, mis ojos invisibles se deslumbran, cegados por una luz producida por la potente explosión de una vieja estrella no muy lejana.
-Prosigo el devenir cósmico y en la lejanía, observo, como un viejo tesoro mágico se acerca por momentos hacia mí.
Fué la curiosidad, la llave que dió lugar a descubrir que albergaba tan sorprendente tesoro.
Ahí, en lo alto de los principios, observo encantado, como una dulce niña con su felicidad innata, juega, con su amoroso padre, en la orilla de una cristalina playa.
Al otro lado del imponente océano, dos oseznos polares, corren y saltan sobre un mar de hielo azul-turqués bajo la protectora mirada de la madre oso.
Fascinado, prosigo en el descubrimiento, contemplando la enorme elegancia de miles de rosas con diversos colores. Cientos de tulipanes, tocan sus trompetas a la sombra de un viejo roble milenario, rodeado por un sinfín de olivares, encinas y abedules.
Muy cerca, una masa interminable de bosques y selvas tropicales, calmadas por el dulce ronrroneo de miles de cascadas que brotan y derrochan un sinfín de vida.
Entre medio de una densa vegetación amazónica, unos gorilas, saltan y se divierten sin preocupaciones, bajo la atenta mirada de un macho espalda-plateada.
Los tigres, hacen gala de su fuerza y astúcia en el arte de la caza.
Unos pacientes cocodrilos, esperan impasivos, la cercanía de una alma despistada.
En el orizonte, los caballos salvages, corren en libertad y los Índios Shius, cabalgan con sus flechas en mano, al acecho de unos imponentes bisontes que les dan alimento y abrigo a sus familias.
Los pájaros con sus plumages de diversos colores, cantan sus bellas melodías, mientras, unos perezosos koalas, descansan adormecidos en la copa de un viejo nogal.
En la inmensidad de los mares, las ballenas, nadan y se sumergen a sus anchas, enseñando a sus pequeños ballenatos el arte de sobrevivir en la dura travesía de un océano a otro.
Tras semejante magnitud de belleza y amor entre seres vivos, continuo en la búsqueda insaciable de bellos sucesos. Deslumbrado por su brillo dorado, encuentro unas relucientes monedas de oro, acompañadas de unas preciosas esmeraldas, rubís y unos límpidos y brillantes diamantes .
Ésto, despierta en mí, una codicia y un deseo atroz de ansiar nuevas riquezas, llevándome a descubrir más al fondo, unos extraños pozos, con unas gigantescas chimeneas que ocupaban el lugar hasta ahora inmutable del sosiego de los mares.
Estos pozos, obtenían un extraño líquido negro, de unas fosas antiguas de fósiles en descomposición, acumulados durante miles de años, que emitían un humo perturbador, que ennegrecía la pureza hasta ahora innalterada del azul del cielo y cubrían de oscuras manchas negrizas, centenares de kilómetros de océanos.
Extranado por semejante suceso, observo,como esas majestuosas ballenas que antes nadaban a sus anchas, desorientadas y asustadas són cazadas por unos grandiosos barcos flotantes.
Trozos de hielo de tamaño considerable, se desprenden del viejo continente helado y se derriten, con la brevedad de una gota de rocío con los primeros rayos del alba, separando, esos pequeños oseznos del amor y la seguridad de su madre oso.
Unos extraños seres, identificados con el nombre de humanidad, portaban unos extraños abrigos, bolsos y zapatos de pieles de bisonte y de cocodrilos, que ya no vivían y corrían a sus anchas, en sus hermosas praderas y acaudalados rios.
Selvas tropicales, eran taladas hasta prácticamente la desaparición. Los gorilas, asustados y desconcertados, se apiñaban en pequeñas comunidades arbóreas, sin apenas espacio y alimento para sobrevivir.
Los tigres, ya no hacían gala de su majestuosidad y se encontraban presos, entre barrotes y sevían de entretenimiento en extraños espectáculos, que entretenían y saciaban el orgullo narcisista y egocéntrico de esos humanos, que, caminaban estresados y sin tiempo, para disfrutar de sus propias vidas y sus seres queridos.
Esa niña que antes jugaba con dulzura apasionante, tenía que malvivir, rebuscando entre bertederos,donde acumulaban, cientos y cientos de toneladas de residuos.
Otros humanos, se mataban entre ellos en sufridas guerras, presos del odio y ansiados por el poder y la riqueza sobre otros humanos.
No conseguía entender, como, unos pocos de éllos, presumían de incontables objetos materiales, yates, coches de alta gama, casas enormes vacías de amor y una infinidad de aparatos que se acumulaban sin uso alguno, en unos cargados desvanes, que parecían auténticos cementerios de objetos.
Sus rostros eran el reflejo de la infeliciad de sus almas, pero seguían trabajando horas y horas acosta de su más preciado tesoro ¨el tiempo¨.
Algunos fallecían de hambre, otros en mortíferas epidémias que asolaban paises enteros, mientras, otros guiados por drásticas religiones, llebaban a los humanos a unos extremos fuera de todo sentido común.
Algunas mujeres, ocultaban la belleza prístina de sus rostros con velos oscuros. Se construían grandes templos e iglesias, que dinfundían un aférrimo mensage, aliado con el miedo y el sufrimiento que asolaba todavía más a esos sufridos humanos.
Preso del pánico y acontecido por esos inhumanos sucesos, de tanto odio, envidia y rencor que asolaban a toda la huamnidad y aniquilaban millones de especies y seres vivos, sin poder contenerme ante semejante barbária, no pude evitar,algo hasta ahora inusual y desconocido para mí . ¡ Mi primera lágrima ¡. A la cuál y guiado por una intuición de mis mas profundos adentros, le puse el nombre de CONCIENCIA y la transformé, en la llave que podría volver abrir ese tesoro, que deposité en un pequeño planeta azul, acariaciado por unos rayos de luz, que provenían de una estrella cercana a la que llamé SOL.
Muy cerca de este pequeño plantea, se encontraba un pequeño satélite al que llamé LUNA y le encargué una misión para toda la eternidad, tenía que se testigo directo del cambio de comportamiento de esa Humanidad.
Casi sin fuerzas para proseguir en mi devenir espacial y como consecuéncia del sufrimiento que me había generado tanto dolor entre esos humanos, exausto y apenas sin fuerzas me desintegré sobre este planeta al que previamente, llamé...PLANETA TIERRA.
- Derrepente....Despierto¡¡¡¡ en medio de la noche, un tanto asustado, por el repentino diálogo ensimismado de una vieja lechuza. Un poco transpuesto y desconcertado, observo como la voz de mi conciencia, me impulsa a derramar unas lágrimas cristalinas que se deslizan una tras otra por todo mi rostro. A las cuales con todo mi AMOR, este bohémio poeta, vividor de sueños, las identifico con el nombre de ¨LÁGRIMAS DE LA ESPERANZA¨.....